


Justo al filo de la caída existe una piscina natural excavada en la roca conocida por los lugareños como Devil’s pool (la piscina del diablo).




Aunque algunas personas que han visitado el lugar aseguran que es completamente seguro, lo cierto es que hay echarle valor para bañarse en esta piscina sin ser presa de un ataque de pánico.


A pesar de lo idílico de las imágenes, las agencias de viajes advierten de que se trata de una actividad muy peligrosa y recuerdan que el acceso al lugar sin los permisos adecuados está prohibido.