El cartel fue colocado en la esquina sudeste de Times Square, sobre la fachada del hotel Claridge entre la 44 y Broadway, y allí permaneció desde 1941 hasta 1966, fecha en que fue derribado el edificio. Durante aquellos años, el protagonista del anuncio fue cambiando sucesivamente, alternando entre soldados, marinos o pilotos, y la campaña se extendió a otras ciudades del país.
“Caminaría una milla por un Camel”, decía el anuncio, y escupía un gigantesco anillo de humo cada cuatro segundos. El mecanismo que hacía funcionar el cartel era bastante sencillo. Insertado en la pared del edificio, una pequeña cámara acumulaba vapor de agua y lo expulsaba gracias a una membrana de plástico a modo de diafragma. Una vez expulsado, un segundo motor contraía el vapor para expulsarlo en forma de anillo.
Para hacerse una idea de la perfección de su maquinaria, se calcula que, hasta 1966, el cartel fumador expulsó cerca de 200 millones de anillos.
Lo triste de esto, es que posiblemente, esos 200 millones de anillos (de vapor de agua, afortunadamente) habrían captado a una cantidad ingente de nuevos fumadores, que tristemente hoy, casi 70 años después, muy probablemente estén en el limbo o un poco mas abajo...
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