Un curioso y extraordinario suceso aconteció en los Juegos Olímpicos de 1912, celebrados en Estocolmo.
En la prueba de maratón el corredor japonés Shizo Kanakuri desapareció de la competición y no se volvió a saber nada de él, hasta 1966, cuando fue localizado y entrevistado por la Televisión Sueca.
En la entrevista de la televisión sueca se le ofreció terminar la maratón inacabada. Kanakuri aceptó y la completó en un tiempo de 54 años, 8 meses, 6 días, 8 horas, 32 minutos y 20,3 segundos. ¡Todo un record!
En este accidentado maratón también ocurrió un desagradable acontecimiento, el portugués Francisco Lázaro murió en plena carrera debido al intenso calor, organizándose una colecta para sus familiares.