Lo crean o no Tiger Woods o Sergio García no tendrían ninguna posibilidad de derrotar a la boliviana Andrea Quispe, la excepcional golfista indígena aymara de la fotografía. No, al menos, si jugaran en el Club de Golf de la Paz, a 3.342 metros de altitud, el más elevado del mundo.
El Club de Golf de la Paz fue fundado en 1912 en el distrito de lujo del sur de La Paz, en Bolivia, y del mismo fueron socios ex presidentes de Bolivia, como Mamerto Urriolagoitia y los liberales Gonzalo Sánchez de Lozada y Carlos Mesa.
Un grupo de seis mujeres aymaras, entre las que se encuentra la elitista Andrea Quispe, entrenan, practican y celebran torneos de este exclusivo deporte, que nació en Escocia hacia el siglo XVI y se extendió luego a Inglaterra. Andrea y sus compañeras comparten el green con las acaudaladas damas que lo frecuentan.
Sin embargo, las mujeres indígenas no visten los típicos y sofisticados atuendos de las féminas golfistas, como las camisetas de cuello o las zapatillas especiales, sino que recurren a sus atuendos de vestir comunes, como tradicionales suéteres de lana de alpaca o zapatos con plantillas de cuero de forma ovoidal. Al parecer para estas jugadoras no supone ningún impedimento su pollera (gruesa falda aymara, con pliegues múltiples), para golpear las bolas de golf.
Las imágenes fueron tomadas en el Club de Golf de la Paz en noviembre de 2008.
Por si acaso, los fabricantes de prendas de golf ya andan rezando para que no se imponga la moda andina.
Las imágenes fueron tomadas en el Club de Golf de la Paz en noviembre de 2008.